Diferentes situaciones. Una solución.Eficacia de la rotura de puente térmico donde más se necesita.
El Schöck Isokorb® separa térmicamente los componentes en voladizo, reduciendo la transmisión de calor del interior al exterior. En esta función, el elemento de aislamiento térmico en voladizo es conocido desde hace tiempo por los arquitectos y proyectistas. En los climas cálidos la función se invierte.
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Los flujos de energía que se producen en un edificio se pueden resumir de la siguiente manera: parte de la energía se transmite desde o hacia el exterior; el sistema HVAC equilibra esos flujos con el fin de mantener una temperatura confortable en el interior. Estos flujos provienen principalmente de la transmisión a través de paredes y techos, la radiación solar directa, la ventilación y de los puentes térmicos. La importancia de los puentes térmicos aumenta cuando se mejora el nivel general de aislamiento, y representan hasta un tercio de los flujos de energía completos en nuestros edificios modernos.
Un puente térmico es un punto local del edificio en el que el calor se disipa con mucha más rapidez que en otras zonas. Normalmente, los puentes térmicos se encuentran donde elementos como balcones o marquesinas penetran en la envolvente del edificio. El flujo térmico es especialmente elevado si esos elementos -balcones o marquesinas y forjados- están hechos de un material como el hormigón o la mampostería, con una alta conductividad térmica, o cuando se requieren grandes secciones de acero para la conexión de los componentes por razones de carga estática.
El Schöck Isokorb® se ha utilizado durante varias décadas en regiones donde las temperaturas son significativamente más altas, o menores que la temperatura interna del edificio para evitar este flujo térmico, así como los problemas que crea: molestias térmicas, disconfort percibido, pérdidas de energía, condensación, crecimiento de moho, y deterioro de las piezas estructurales.
En las regiones cálidas, la radiación solar calienta los componentes externos, y esta energía se transmite hacia dentro a través del puente térmico, donde el sistema de aire necesita sacar esta energía del edificio. El Isokorb® evita que entre calor.
En las regiones frías, el sistema de calefacción calienta la habitación y los componentes internos, y una parte de esta energía se transmite hacia fuera a través del puente térmico. El Schöck Isokorb® evita que salga calor.
El Isokorb® ayuda a reducir la factura energética, hace que los edificios sean más duraderos y permite instalar sistemas de climatización más ligeros y baratos.
